Club Clandestino de Cutty Sark (Madrid)

Ya ha pasado el suficiente tiempo como para que no deba pasar más, antes de hacer eco de esta magnífica acción de Cutty Sark (scotch blend whisky, para quien lo dude) en Madrid. Se trata de unas fiestas clandestinas al purísimo estilo speakeasy neoyorkino de la década de 1920, en las que tuve el placer de servir, junto a Antonio Aranda y David Pérez, entre otros. Se llevó a cabo el pasado noviembre 2012 y con una ambientación muy lograda.

Un local no adaptado para ello originalmente y que el equipo de Drinks Marketing se encargó de adaptar para 4 días solamente, aunque quedaron en tres, por la inesperada visita y clausura por parte de la policía (la de verdad, la policía del Ayuntamiento de Madrid), tal y como habría sucedido en los años '20. No eran actores, como se planteó en algún momento en las ideas de la planificación... Un sujeto con gorra y pinganillo, en una puerta desvencijada cualquiera de una calle de Madrid (por la zona de Plaza de España), una contraseña que se le da, un pasillo de dudosa seguridad por el que te guía aquel sujeto hasta la sala en cuestión. Escaleras abajo, escaleras arriba y de pronto, un viaje en el tiempo: se abre una sala entre paredes desconchadas y húmedas, luz tenue, una elegante banda de jazz que a cierta hora daría paso en un potente DJ, gente bailando y charlando con tazas como de café en la mano (¡...!), chicas burlesque invitando a desinhibirse y al fondo, una barra con tres bartenders que visten bata de laboratorio y preparan una sencilla y directa carta de bebidas; Sazerac, The Elk's Own, Blood and Sand, Whisky Sour, Barbary Coast y The Scofflaw. ¡Aquellas tazas eran esto! En bandejas, bagels, brownies, muffins... La primera parte de la fiesta, con una banda en directo, que permitía hablar y llevar una velada más tranquila aunque divertida y a partir de cierto momento, un DJ que subía el tono, volumen y beat de la música, haciendo del lugar más un fiestón en el que todos los invitados —la mayoría ajenos a la industria de bebidas— pasaban la noche convirtiéndose en alocados fans del sazerac, del blood & sand y del the elk's own (¡...!).

Del 7 al 9 de noviembre 2012 la liamos en aquel agujero divertido y predicamos La Palabra del cóctel. El día 10, planificado, la mencionada policía hizo su visita y su papel, pero a pesar del bajón momentáneo que aquello suponía, también aportó su toque de ambientación lograda y resultó en todo un éxito de campaña.

Seguramente habrá más liadas de este tipo, así que prestar atención a Cutty Sark. Gracias a Jesús Ramirez, quien ideó y dirigió todo esto y el resto de la campaña de la que estas fiestas formaban parte.